Mi mujer ya no me quiere, pero no sé cómo reaccionar.
No eres ni el primero ni el último hombre que experimenta una ruptura amorosa.
De hecho, tras años juntos, puede ocurrir que tu relación se desmorone.
Pero el amor no siempre tiene la culpa.
Mi mujer ya no me quiere, al menos esa es la impresión que tengo… ¡Pero no me ha dicho nada a la cara!
-Sylvain, 32 años
El estrés en el trabajo, las obligaciones paternas o familiares, los problemas de salud, etc., pueden ser causas de distanciamiento entre dos miembros de la pareja.
Cuando se acumulan problemas de cualquier tipo, es posible que sientas que tu mujer ya no te quiere, pero a menudo se trata sólo de ansiedad y estrés causados por factores externos.
A menos que una mujer diga claramente “ya no quiero a mi marido”, usted puede tener una oportunidad de salvar su relación.
Hoy veremos qué puedes hacer para reavivar la llama y mantener la comunicación en tu relación.
También responderemos a la pregunta: “¿Cómo sé si me quiere?
Te prometo que encontrarás todas las respuestas que buscas.
Mi mujer ya no me quiere, su comportamiento es bastante claro. Pero no me lo ha confesado. Así que no sé qué hacer.
-Willy, 35 años
Mi mujer ya no me quiere, ¿debo rendirme?
Tienes dos opciones:
- O amas a tu esposa, así que debes intentar salvar tu relación;
- O ya no quieres a tu mujer, así que simplemente tenéis que separaros.
De hecho, ¿qué sentido tiene luchar si ninguno de los dos está dispuesto a hacer el esfuerzo de permanecer juntos?
Pero me gustaría recordarte una cosa: si tu mujer ya no te quiere y decides reconquistarla, debes conocer tus límites. No querrás convertirte en un acosador.
En resumen, no quieres forzar su mano ni ponerla en una situación incómoda.
Mi mujer ya no me quiere, quiero recuperarla, pero tengo miedo de ser demasiado agresivo y asustarla.
-Mohammed, 28 años
Aquí tienes algunos consejos que debes recordar antes de iniciar la batalla para reconquistar a tu mujer.
1. “Mi mujer ya no me quiere, así que decidí hablar con ella abiertamente”. – Paul, 34 años
El primer paso debería ser buscar una conversación juntos.
Por supuesto, se trata de un tema increíblemente delicado. Un tema del que a la gente no le gusta hablar directamente. Lo cual comprendo perfectamente.
Pero: hay que comunicar precisamente estos temas difíciles.
¿Cómo cuáles?
- Busca un lugar neutral donde quieras reunirte con ella.
- Asegúrate de que puedes hablar allí sin que te molesten.
- Asegúrate de que no hay roces ni discusiones.
- Tómate mucho tiempo para hablar abiertamente.
Resultado: por fin tienes las cosas claras y, si es necesario, puedes elaborar un plan para salvar la relación.
2. “Mi mujer ya no me quiere, pero la se*e sigue siendo estupenda”. – Raphaël, 29 años
En este caso, todavía tienes muchas posibilidades de darle la vuelta a la relación.
Sobre todo porque la atracción sigue siendo física.
Ahora sólo es importante una cosa:
¡Hablar mucho! Y trabajar juntos en las causas de la falta de amor (más allá del sexo) que frenan vuestra relación…
- ¿No tenéis nada más que deciros?
- ¿Os peleáis mucho?
- ¿Tenéis planes de futuro diferentes?
- ¿Sois demasiado pegajosos?
3. “Mi mujer ya no me quiere, ¿es posible la terapia? – Marc, 31 años
A veces os queréis, pero la relación está completamente bloqueada.
El resultado es que os distanciáis y sofocáis el sentimiento de amor.
Esto suele ocurrir cuando discutís mucho.
En otras palabras: la relación está en punto muerto.
La solución: terapia de pareja.
¿Por qué?
Porque un terapeuta tiene una perspectiva profesional y actúa como una tercera persona neutral.
Señala vuestras áreas problemáticas y encuentra vuestros puntos de intersección.
4. “Mi mujer ya no me quiere, ¿nos ayudaría pasar tiempo a solas? – Thibault, 32 años
A veces, simplemente te marchas.
Al fin y al cabo, los seres humanos también necesitamos nuestra libertad.
Y si no tenemos esa libertad, nos sentimos incómodos.
El resultado: uno a uno, puedes descubrir tus problemas y elaborar un plan de acción.
Ambos podéis reflexionar y analizar vuestros problemas.
Con el tiempo, empezaréis a echaros de menos de nuevo.
5. “Mi mujer ya no me quiere, ¿es nuestro amor una calle de sentido único? – Thomas, 36 años
Nota muy importante: no inviertas en un amor unilateral.
Por supuesto, ¡luchar por amor es heroico! Pero lucha sólo si el precio es justo.
Si su pareja ya ha terminado con usted…
… también ha comunicado claramente su falta de amor y quiere separarse de ti…
… ¡entonces no debes invertir!
¿Por qué no? Pagarás el precio con :
- tu orgullo
- tu independencia
- tu dignidad
6. “Mi mujer ya no me quiere, ¿cómo puedo volver a ser atractivo?” – Simon, 36 años
El atractivo es la clave del amor.
Así que, ¡vuelve a ser más atractivo para ella!
Lo que quiero decir es que, cuando la conociste, tenías ciertas características…
- Has mostrado tu mejor cara.
- Quizá también hayas entrenado mucho.
- O quizá tenías objetivos vitales que pusiste en práctica.
- Tenías algo especial.
Pues bien, ¡esa chispa parece haberse perdido!
¡Y debe haber una razón! Encuéntrala.
7. “Mi mujer ya no me quiere, ¿cómo puedo volver a vivir juntos? – Loïc, 29 años
Bueno, ¡vemos estas aventuras en todas las películas de Hollywood! Y dos personas siempre se enamoran…
¿Por qué?
Porque las experiencias nos conectan.
Cuanto más vivimos juntos, más fuerte se hace nuestro vínculo.
¿Qué significa eso para ti?
Empieza a hacer más cosas ahora. Haz viajes cortos. Salid a pasear o de excursión. Id juntos al gimnasio. ¡Id juntos a las exposiciones!
8. “Mi mujer ya no me quiere, ¿un final terrible o una película de terror interminable? – Christophe, 37 años
¡Mejor un final terrible que un horror interminable!
Si todavía la quieres, una ruptura será muy dolorosa. Porque una ruptura significaría que tienes que perder a alguien que quieres tener contigo.
Si se cumplen ciertas condiciones, entonces deberías romper.
Así que mi consejo es, rompe si se cumplen las siguientes condiciones:
- Una conversación común ya no ayuda.
- Ha conocido a otro hombre.
- Ya no quiere trabajar en la relación.
- De hecho, estáis peleando y viviendo codo con codo.
9. “Mi mujer ya no me quiere, ¿hay otro hombre? – Luc, 29 años
¿Le es infiel su mujer?
Si está casado, ¡difícilmente lo admitirá!
Y es cierto que es lo último en lo que debería pensar.
Pero intente averiguar si hay alguien más implicado. Créeme, ¡las mujeres siempre dirán que no!
Lo mejor es contratar a un detective. ¡Alguien que investigue por ti!
10 “Mi mujer ya no me quiere, ¿debo empezar a pensar sólo en mí? – Fabien, 31 años
¡Concéntrate en ti mismo!
¿Qué quiero decir con eso?
- No te preguntes por qué ya no te quiere.
- No inviertas demasiado ni des demasiado.
- No te compadezcas de ti mismo.
No, ¡céntrate totalmente en ti mismo!
¿Por qué? Porque estás aprendiendo activamente a ser tú mismo.
Porque estás aprendiendo activamente a ser feliz contigo mismo. Es fácil desaprender esto, especialmente después de un largo matrimonio.
Porque vuelves a ser más atractivo para tu pareja. Porque aprende que puedes ser feliz incluso sin ella. Que eres independiente.
Porque consigues un “zoom out”. Es decir, puedes juzgar la situación desde fuera. Y, en consecuencia, tomar decisiones mucho más acertadas.
Importante: ¡no huyas ni te escapes! Pero piensa primero en ti y luego en la relación.
11. “Mi mujer ya no me quiere, ¿quién debe estar primero?” – Bastien, 26 años
El amor propio siempre es lo primero.
Este consejo es relativamente sencillo y directo.
… ¡Y sin embargo tan eficaz!
Siempre he tenido claro que el amor propio es lo primero.
La regla es: primero viene el amor propio y luego debe venir el amor por la pareja.
Es precisamente en esta situación difícil cuando olvidamos nuestro amor propio.
Mi mujer ya no me quiere, pero yo siento que ya no me quiero a mí mismo. Así que quizá estoy un poco confuso y perdido.
-Edouard, 37 años
Las razones:
- Queremos más lo que no podemos tener.
- Tu mujer ya no te quiere, ¡así que tú la quieres más!
- Y sobre todo, llega tan lejos que olvidas tu autoestima.
¡Un error fatal!
12. “Mi mujer ya no me quiere, ¿con quién debo hablar de ello? – Patrice, 43 años
¡Cuéntaselo a muchos amigos! No ocultes la situación y no te guardes tus problemas para ti.
Porque difuminar las líneas sólo empeora las cosas. Tan mal que incluso puedes acabar con una depresión.
Así que siéntate, habla con tus amigos y comentad toda la situación. Intenta comprender el punto de vista de tus amigos.
E intenta construir nuevas perspectivas.
Mi mujer ya no me quiere, ¡pero voy a recuperarla!
¡Te quiero, esposa mía!
Una situación difícil, sin duda. Ahora es aún más importante tener una dirección.
Por eso debes seguir los siguientes pasos si quieres reconquistar su corazón.
Paso 1 – Piensa en lo que quieres y necesitas para ti
Sientes que ya no te queda nada porque tu mujer ya no te quiere.
Pero este periodo también puede ser una oportunidad. Porque ahora puedes revisar algunas cosas de tu vida. Y pensar detenidamente. Sobre lo que necesitas. Y quieres…
¿Quieres divorciarte?
¿Cómo suena ese pensamiento? ¡Escúchate!
Pero aborda también la cuestión con bastante racionalidad. ¿Cuáles serían las ventajas y los inconvenientes de un divorcio? ¿En términos económicos, en términos jurídicos?
No está de más que lo consultes con un abogado.
¿Quieres seguir con ella?
Ahora imagina que seguís juntos. A pesar de todo, a pesar de los problemas actuales. ¿Crees que, a pesar de los obstáculos, podéis tener un futuro juntos?
De nuevo, aborda la pregunta de forma racional. Haz una lista de todas las ventajas e inconvenientes. Añádelas poco a poco cada vez que pienses en algo. Mira esta lista. Y ten en cuenta estos resultados por ahora.
¿Seguir en una relación sin sentirte querido?
Ahora empieza a ser un poco doloroso, como advertencia. Pero este ejercicio también es necesario:
Imagínese ahora que usted permanece en una relación con ella. Pero nada cambia en sus sentimientos: no tiene ninguno. ¿Qué se siente al no sentirse querido?
¿Está realmente dispuesto a mantener la relación en estas circunstancias? Sea absolutamente sincero también en este punto.
Paso 2 – buscar una conversación común
Como advertencia: ha llegado el momento de ir al grano. Porque es muy difícil buscar conversación. Sobre todo para los hombres, para ser sinceros.
Pero la comunicación es necesaria. Hablar de ello. Lo más abierta y sincera posible.
1. ¿Por qué es tan difícil entablar una conversación abierta?
Porque, en cierto sentido, te estás exponiendo. Entra en terreno desconocido: explica tus sentimientos.
En otras palabras: muestra tu lado vulnerable.
2. Tomar conciencia: ¿cuáles son los peligros de una conversación abierta?
Tu mujer te dice lo que ya sabes: que ya no te quiere. Y ahora seguirá sus palabras con las acciones correspondientes. En resumen, te dejará.
Sinceramente, un final tan terrible es mucho mejor que un horror sin fin. Porque ahora las cartas están sobre la mesa.
3. Conciencia: ¿qué cosas buenas pueden pasar?
Una situación así siempre es una oportunidad. Quizá esta frase suene un poco trillada. Pero créame, realmente lo es.
Porque esta confrontación lleva a la discusión. Quizá ahora ambos podáis tener una conversación clarificadora. Os une. Os muestra lo que tenéis el uno en el otro.
4. Déjate claro a ti mismo que, al final, sólo podrás conquistarla a través de la conversación.
Como ves, sólo puedes conquistarla a través de una conversación tan abierta. Porque has ido más allá. Has demostrado valentía.
5. Déjate claro que sólo puedes perder sin una conversación abierta.
¿Y si esa conversación abierta no se produce? Instintivamente sabrás: “Te quiero, esposa mía, pero no he tenido el valor de hacerlo. Huyo de la situación. Cierro los ojos”.
Esto, a su vez, es venenoso para tu confianza en ti mismo.
6. Dirige la conversación para mediar en la disputa
Sí, lo sé: es difícil. Pero es realmente importante mantener esta conversación de la forma más pacífica posible. Deja las emociones a un lado por el momento. De lo contrario, las cosas se nos irán de las manos muy, muy rápidamente.
Paso 3: llegar a una conclusión
Se ha dado un paso muy importante. Es hora de sacar conclusiones. Y de atreverse a mirar hacia el futuro (común):
1. Separación (¡tú debes iniciar la separación!)
Si ésta es la conclusión de vuestra discusión, no hay tiempo que perder.
Ya no quiero a mi marido, pero no deja de darme la lata para que volvamos a estar juntos. Es agotador.
-Carole, 31 años
2. Superar la angustia
Sí, la angustia llegará. Porque, después de todo, sigues sintiendo algo por ella. Qué hacer en este caso?
3. Si ambos queréis volver a intentarlo
A pesar de todas las dificultades, aún no podéis dejarlo.
Ya no quiero a mi marido, pero al mismo tiempo no quiero separarme de él. Así que estamos trabajando juntos para reconstruir nuestra relación.
-Pauline, 39 años
- Emprender juntos una terapia de pareja
- Trabajen conscientemente en sus problemas
Lo más importante es: los dos tenéis que estar dispuestos a trabajar en vuestra relación de pareja. Para hacerlo mejor.
Y eso incluye sobre todo una cosa: resolver vuestros problemas. Trabajar en ellos. Y de forma deliberada. Al fin y al cabo, ambos queréis volver a tener una relación bonita y feliz.
¿Cómo sé si me quiere?
Comprender a las mujeres a veces no es tan fácil. Pero hay señales claras de que tu enamorada ya no te quiere.
Así que la pregunta no es “¿cómo sé que me quiere?”, sino más bien “¿cómo sé que se acabó?”.
1. Ya no le importa lo que te pasa.
Antes te hacía preguntas. Qué has hecho hoy. Cómo te ha ido el día, etc. Pero ya no lo hace. Y no lo ha hecho por algún tiempo…
Mi mujer ya no me quiere, porque ni siquiera me pregunta cómo estoy.
-Waly, 31 años
2. Está cansada del sexo.
No para de decir: “Estoy demasiado cansada”, “Mañana, cariño” o “No puedo”.
Pero al día siguiente oyes lo mismo…
Ya no quiero a mi marido, así que no quiero tener contacto físico con él.
-Corinne, 41 años
3. Cada vez lleva más su propia vida.
Sale con amigos que no conoces. Y casi no tiene tiempo para ti. Otras cosas son más importantes ahora.
Mi mujer ya no me quiere, pasa todo el tiempo con sus amigas. De hecho, hace casi ocho meses que no las veo.
-Amaury, 33 años
4. Está un poco ausente.
Físicamente está ahí. Pero ya no te sientes cerca. Porque mentalmente está ausente. Dispersa. De hecho, ya no puede centrarse en ti y en vuestra relación.
Mi mujer ya no me quiere. Hablar con ella es como hablar con una pared. No reacciona en absoluto.
-Bertrand, 42 años
5. Te critica constantemente.
Nunca podrás complacerla. No importa cuánto lo intentes. Nunca es suficiente. Siempre vuelve con nuevas críticas.
Está claro que mi mujer ya no me quiere. No me ha dicho un cumplido en años. Y cuando habla de mí, siempre es negativamente.
-Anónimo, 31 años
6. Está cansada de visitar a su familia y amigos.
Ella sigue encontrando una nueva excusa por la que no puede ver a tu familia o amigos hoy. Y esto ha estado sucediendo durante algún tiempo…
Este año mi mujer se negó a ir a casa de mis padres por Navidad. Fue entonces cuando me di cuenta de que mi mujer ya no me quiere. Efectivamente, fue la gota que colmó el vaso después de meses de distanciamiento y discusiones.
-Anónimo, 36 años
7. Ya no te escucha.
Te quiero, mi mujer. Así que me gustaría que me ayudaras a resolver mi problema con mi jefe.
-Tom, 29 años
Podía escucharte durante horas. Sobre lo que te emocionaba. ¿Pero ahora? Coge el móvil mientras habláis. Y ella no está realmente allí. En fin, ya no le importa…
8. Siempre quiere discutir contigo.
Por alguna razón que viene de quién sabe dónde. Nunca puedes estar a salvo de sus ataques de ira. Y ella se te aparece como un volcán que amenaza constantemente con explotar…
Te quiero, esposa mía, pero tu comportamiento es difícil de soportar.
-Vivien, 41 años
9. Habla mal de ti delante de los demás.
Se queja constantemente de esto y aquello, con amigos, familia, etc. En el peor de los casos, incluso públicamente: en Facebook o Instagram. ¡Hace mucho daño! Y en cierto modo es solapado…
Ayer me enteré de que mi mujer ya no me quiere. Le dijo a mi hermano que yo sólo era una carga para ella. Había estado bebiendo un poco y se sinceró.
-Karim, 34 años
10. Ya no confía en ti.
Sabías exactamente lo que le pasaba. Lo que la movía. Pero ya no lo sabe. Y de alguna manera sientes que ella ya no confía en ti.
Mi mujer ya no me quiere, porque sé que tiene problemas en el trabajo, pero no me los cuenta. Sin embargo, ¡me enteré de que hablaba de ello con el conserje de nuestro edificio!
-Sam, 37 años
Ella habla de sus problemas con los demás. Y tú ni siquiera sabes lo que le pasa ahora…
¿Cómo sé si me quiere?
Bueno, si no reconoces los signos anteriores en tu amada, ¡ya es una buena señal!
Mi mujer ya no me quiere como antes, ¡pero yo a ella sí!
Sí, es una situación delicada. Y exige mucho de los dos.
Pero esta situación es perfectamente normal. Porque nuestras emociones no pueden calcularse ni procesarse de forma tan racional.
En el lado racional, siempre hay cierta “impotencia” ante los sentimientos: “¿Es correcto que me sienta así? ¿Cómo sé que puedo confiar en estos sentimientos?
Así que la incertidumbre es muy, muy grande. Por ambas partes. ¿Qué debemos hacer ahora?
Sigue obstinadamente las instrucciones que te di en el capítulo anterior.
Aunque te resulte difícil.
Habla con tu mujer.
Y escúchate a ti mismo.
Sé sincero con tus sentimientos.
Entonces encontrarás el camino correcto para ti.
Pero, ¿y si tu mujer te dice claramente: “Ya no quiero a mi marido”.
Ma femme ne m’aime plus, il n’y a pas de doutes puisqu’elle le répète ouvertement à tout le monde.
-Sammy, 38 ans
No malgastes palabras innecesarias.
Sepárate de ella. ¡Antes de que ella lo haga! Porque esto último es mucho peor. No sólo para el orgullo (masculino).
¿Por qué deberías romper con ella si ya no te quiere?
El orgullo masculino es una razón para poner un límite. Porque seamos sinceros: es mucho mejor cuando te dices a ti mismo: “He terminado esta relación”.
Has sido activo y no te han presentado hechos consumados. En lugar de eso, has tomado la iniciativa. Y dejaste a tu mujer. Sólo esta toma de conciencia da fuerza.
Y crea confianza en sí mismo.
¿Cómo puedes dejarla si ya no te quiere?
Ahora se trata de terminar la relación lo más “civilizadamente” posible. Pero, ¿cómo hacerlo mejor? Aquí tienes algunos consejos:
- Dile que es absolutamente necesario que hables con ella.
- Reúne argumentos. ¿Por qué tienes que terminar la relación?
- Sobre todo, utiliza frases con el pronombre “yo”.
- No la ataques personalmente.
- No seas agresivo.
- Escucha también su punto de vista.