¿Cuál es la raíz de la malicia del manipulador?
¿Por qué elige victimizar para manipular?
Un manipulador es alguien que utiliza técnicas de manipulación para influir en los demás y utilizarlos para sus propios fines egoístas.
Este tipo de persona nunca está contenta consigo misma ni con los demás.
De hecho, no disfrutan en absoluto de lo que hacen o consiguen.
Un manipulador tiene una visión distorsionada del mundo, le gusta experimentar sufrimiento, inventa excusas constantemente, dice que todas las desgracias provienen de experiencias negativas del pasado, aunque esto no sea cierto.
Una persona así realmente quiere ser valorada, pero no puede valorarse a sí misma como le gustaría, por lo que se siente infravalorada, poco apreciada.
Sea cual sea el método que utilice el manipulador, la psicología esconde su complejo de inferioridad, y el manipulador cree que este complejo sólo puede superarse luchando consigo mismo y con los demás.
Pero, ¿por qué es así?
¿De dónde viene la malicia del manipulador?
¿Y cómo protegerse de una persona así?
¿Quién es el manipulador?
Todas las parejas tienen problemas, conflictos y malentendidos.
Pero con un manipulador, estas discusiones se vuelven agrias.
Esto se conoce como manipulación emocional y puede acarrear muchos problemas psicológicos.
La manipulación emocional es cualquier técnica psicológica utilizada para controlar, menospreciar y atemorizar a alguien.
Esto crea una dependencia malsana dentro de una relación amorosa.
El manipulador utiliza diversas técnicas con su pareja:
- Un manipulador emocional utiliza tus defectos, debilidades e inseguridades para menospreciarte.
- Con la luz de gas, te obliga a cuestionar todo lo que ocurre en la relación.
- Utiliza a sus allegados y los pone en su contra.
- La culpa es el arma favorita del manipulador.
- El comportamiento pasivo-agresivo del manipulador le permite proyectarse negativamente sobre su pareja.
- El “cambio de objetivos” es otra táctica manipuladora que puede hacerte sentir insegura en tu relación.
- La “cortina de humo”, o distracción, es una táctica utilizada para resolver un problema en la relación.
- Un manipulador puede ignorarte cuando dices “no”, sin tener en cuenta tus límites.
¿Cuál es el origen de la malicia del manipulador?
Victimizar para manipular es más o menos la consigna del manipulador.
Pero, ¿por qué?
Hay un truco, ¡y no a todo el mundo le gustará!
Te guste o no, es importante entender que el manipulador no es malo a propósito.
Sí.
Por difícil que resulte aceptarlo, la maldad del manipulador es para él más una necesidad que un medio.
Me explico…
El manipulador es a menudo (casi siempre) un pervertido narcisista.
Como sabes, los pn no sienten emociones.
Así que la malicia del manipulador se explica por el hecho de que culpa a la otra persona del dolor.
Como no lo siente, lo provoca para ver qué pasa.
De hecho, no saben vivir de otra manera.
Es como un modo de supervivencia.
Esto es lo que llamamos proyección negativa.
Al hacer esto, el manipulador se siente superior.
Ven el sufrimiento de los demás como una fuente de autoestima.
Así pues, aunque la malicia del manipulador no sea una “herramienta” que utilice conscientemente, no es una justificación.
Al fin y al cabo, disfruta viendo sufrir a los demás.
De hecho, le da placer, porque es completamente insensible a lo que sienten los demás.
Claramente, su inclinación por esta forma de violencia es peligrosa.
¿La buena noticia?
No estoy seguro de que se puedan llamar buenas noticias, pero hay una cosa importante a tener en cuenta.
El manipulador rara vez es violento, al menos si consigue todo lo que quiere de su víctima.
Si su pareja es sumisa, todo va bien (en su mente).
Pero si ella entiende sus tácticas y se aleja de él, siente que está perdiendo el control.
Y una vez que pierde el control, ¡puede volverse aún más desagradable y destructivo!
En resumen, la malicia del manipulador surge de su necesidad de sentirse superior a los demás.
Evolución de la enfermedad del pervertido narcisista
La culpa y el control son las únicas opciones para el manipulador.
La victimización para manipular es su arma favorita.
Por desgracia, la enfermedad del pervertido narcisista no tiene límites.
Aunque te enfrentes a él, nunca cambiará.
A menudo he oído hablar de parejas que se someten a terapia para curar la enfermedad del pervertido narcisista, pero no funciona.
La naturaleza siempre se impone.
Así que la única solución es escapar de la relación.
La malicia del manipulador: ¿por qué ataca a su pareja?
CONTROL
¡No hace falta decir nada más!
Una relación debe hacernos felices.
Es cierto que nuestra pareja no es responsable de nuestra felicidad -eso está en nuestras manos-, pero una relación de pareja debería influir positivamente en nuestras vidas.
Por supuesto, en toda relación hay altibajos.
Pero incluso en los momentos difíciles, siempre deberíamos estar mejor con nuestra pareja que sin ella.
Porque una relación malsana tiene un efecto inesperado en nuestra salud general.
Hay varias señales de que tu pareja te está manipulando:
1 “Todo es culpa mía
La malicia del manipulador reside en culpar.
Le gusta victimizar para manipular.
¿Cuándo fue la última vez que planteaste un problema y cómo acabó la discusión?
Algunas personas son artistas culpando.
Aunque al principio estuvieras enfadado, acaban haciéndote sentir mal para obligarte a disculparte.
2. “Ya no sé quién soy”
La malicia del manipulador reside en la idea de hacerte dudar de ti mismo.
Un corolario del sentimiento de culpa es el desarrollo de la duda sobre uno mismo.
El amor tiene un gran poder sobre nuestro bienestar.
Por desgracia, también puede ser maravillosamente explotado.
Algunas personas manipulan a sus parejas señalándoles sus defectos y haciéndoles sentir que cometen errores.
Ahora mira en tu interior: ¿siempre eres tú?
3. “Sí, entiendo…”
La malicia del manipulador reside en su capacidad para hacer que aceptes su comportamiento tóxico.
Aunque un compañero manipulador se centre en tus debilidades, eso no significa que no tenga sus propios problemas.
Pero los utiliza hábilmente para librarse de situaciones desagradables.
Su debilidad es su timidez.
Por desgracia, por eso no puede conocer a tus padres.
Está agotado del trabajo, por eso hoy haces tú la compra.
4. “Estoy locamente enamorado
Su poder reside en su encanto.
Las personas que manipulan a sus parejas suelen tener un encanto muy especial.
Es la única manera que tienen de tenerte enredada en su dedo una y otra vez.
A menudo oscilan entre acusaciones y estados de ánimo eufóricos.
¿Por qué la malicia del manipulador es más violenta hacia su pareja?
Los manipuladores están obsesionados con el control.
Por eso están dispuestos a utilizar cualquier técnica para mantener a su pareja bajo su control.
No basta con victimizarse para manipular y culpar a su pareja.
Necesita asegurarse su “lealtad”.
Cuando se mete en una relación, el manipulador encuentra a alguien que alimenta su ego.
Consigue convencerla de que es el novio perfecto y de que nadie se le acerca.
El manipulador necesita ser admirado, querido y mimado.
Por eso miente, oculta sus intenciones y aísla a su pareja para que ella lo vea como el héroe de su vida.
Como ella casi no tiene contacto con sus allegados, no es consciente de la situación.
Entonces, la malicia del manipulador se intensifica.
A puerta cerrada, se vuelve verbalmente violento, la menosprecia y la critica.
Pero delante de los demás, sigue poniéndola en un pedestal.
De hecho, cuanto más necesita el manipulador controlar a alguien, más desagradable se vuelve.
Por eso es especialmente activo con su pareja, porque si la pierde, pierde el control.
Cuando pierde el control, ya no tiene alimento para su ego.
Así que tiene que buscar otra víctima.
Además, pierde su imagen perfecta.
¿Cómo experimenta la pareja la malicia del manipulador?
La malicia del manipulador destruye la autoestima de su pareja.
Con el tiempo, ella duda de sus necesidades, sus ideas y sus cualidades.
Ya no sabe quién es.
Y cuando le presenta hechos consumados y se enfrenta a él, le gusta victimizarla para seguir manipulándola.
Además de perder su círculo social, su apoyo y todo lo que ama, ¡se pierde a sí misma!
Ya no tiene puntos de referencia y la única persona que tiene en su vida es su compañero manipulador.
Si la pareja no se da cuenta de lo que está pasando y no huye, puede deprimirse.
Esto puede llevarla a comportamientos extremos.
¿Qué puede hacer para salir de esta situación?
Dependiendo de cuánto tiempo haya durado el chantaje emocional y de lo arraigados que estén los respectivos comportamientos en las personas implicadas, a veces puede ser muy difícil salvar la relación sin ayuda profesional.
Esto significa que, en caso de duda, la terapia de pareja es la mejor opción.
1. Aumentar la confianza en uno mismo
El chantaje emocional es casi siempre el resultado de una falta de confianza en uno mismo y de una autoestima dañada, ¡por ambas partes!
2. Dar tu opinión
Una retroalimentación adecuada siempre comienza con una descripción de su propia percepción y, en algunos casos, esto puede quitar por completo el viento de las velas del chantaje emocional.
3. Establecer límites
Puede ser útil definir ciertos límites que, en general, no quieres que nadie traspase.
4. Establezca normas
Si os sentáis juntos y establecéis unas normas claras para vuestra relación, podréis ateneros a ellas en situaciones difíciles y también comprobar cómo se siente el otro con respecto a las normas.
5. Para protegerse de la malicia del manipulador, hay que mantener las distancias
Si todo lo demás falla y predominan los sentimientos de miedo, ansiedad o falta de afecto, debes reconocer que la relación ha terminado y que lo mejor es separarse (¡si es posible!).
Conclusión
La malicia del manipulador nace de su necesidad de control.
Victimizarse para manipular es sólo una de las opciones.
Así que aprende a reconocer los signos de la manipulación y libérate de este sufrimiento psicológico.
La enfermedad del pervertido narcisista puede llegar muy lejos, así que alejarse es la única solución.