No estás de buen humor y todas tus obligaciones se vuelven difíciles de gestionar. De hecho, sientes que todo va mal y que has perdido completamente el control.
Así que por la mañana no puedes levantarte. Arrastras los pies y miras el teléfono, lo que te deprime aún más. Porque cuando no te sientes bien, ves esas falsas vidas perfectas y no puedes evitar compararte con todas esas mujeres.
En tu cabeza, tienen todo a su favor y sus vidas son un cuento de hadas. Son ricos, delgados, inteligentes y sanos. Sus casas están siempre limpias y sus hijos se comportan perfectamente.
Cuando se sufre de fatiga moral, no se tiene la capacidad de ordenar las cosas. Tomas la información al pie de la letra y piensas que todas esas ilusiones son ciertas.
Y lo mismo ocurre en tu vida cotidiana.
Si tu jefe dice algo sobre tu trabajo, inmediatamente piensas que eres un don nadie sin habilidades.
Si tu novio te dice que la sopa está demasiado salada, inmediatamente piensas que no puedes cocinar ni siquiera una simple cena.
Los pensamientos negativos y los sentimientos tóxicos se acumulan.
Sin embargo, todo lo que te ocurre es fácil de explicar: estás agotado. Tiene una gran caída de la moral. El mundo no te culpa, no eres un fracaso.
Cuando estás en este estado de ánimo, tienes la impresión de que no le gustas a nadie y que la gente sólo te critica. Pero no es así, es tu mente la que te está jugando una mala pasada.
Desgraciadamente, si no haces algo con tu baja moral, puedes empezar a sufrir trastornos mentales como la depresión o la ansiedad. Estas enfermedades, si no se tratan, pueden ser graves e incluso mortales.
No me canso de repetirlo: tu salud mental es extremadamente importante. Sé que el hecho de no ver síntomas físicos, como un hematoma o sangre, te hace sentir que no es grave.
Que pasará. Pero los problemas de salud mental son muy reales. Y si no te cuidas, estos problemas mentales también afectarán a tu salud física, a tus relaciones y a tu vida laboral.
¿Por qué tienes la moral baja?
Hay varios factores que pueden hacer que sientas fatiga moral: el estrés, la genética, el estilo de vida y los alimentos que consumes.
No estás de buen humor porque estás bajo mucha presión. Ya sea en el trabajo o en tu relación, sientes que llevas constantemente una carga. Y cuando las situaciones estresantes se acumulan, la moral baja.
Por ejemplo, si estás trabajando en un proyecto profesional que tiene un plazo corto, pero sientes que es imposible terminarlo a tiempo, puedes sentirte desmotivado. Esto explica por qué no estás de buen humor
Por supuesto, el estrés por sí solo no puede causar fatiga moral. Basta con que te tomes un descanso y te relajes para que vuelvas a estar en marcha. De hecho, a este factor, ya de por sí importante, se suma su predisposición genética.
¿Tienes un padre con depresión? ¿Alguno de tus padres tiende a ver el vaso medio vacío?
A pesar de ello, su familia puede haberle transmitido sus problemas psicológicos. Y si, además, has recibido una educación basada en la crítica, los comentarios negativos o el pesimismo, obtienes un cóctel explosivo.
En segundo lugar, debes entender que un estilo de vida pobre también explica tu baja moral. Por ejemplo, si bebes a menudo alcohol o eres adicto a los cigarrillos, estás enviando un mensaje subconsciente a tu cuerpo.
“No puedes funcionar sin ella. Y cuando tu cuerpo recibe este mensaje, entra en una espiral de negatividad. Los pensamientos tóxicos se acumulan y te sientes deprimido.
Por último, lo que comes también tiene un impacto en tu fatiga moral. En efecto, cuando los azúcares refinados sustituyen a las vitaminas o a los ácidos grasos buenos, no se está de buen humor. ¿Por qué? Porque estos dos últimos elementos son esenciales para el buen funcionamiento de su organismo.
¿Cuáles son los signos de que no estás de buen humor?
El cansancio moral es un poco como el cansancio físico, salvo que implica a la mente en lugar de a los músculos.
Suele ocurrir cuando te concentras en una tarea mentalmente difícil durante un tiempo. También puede sentir una bajada de moral si está siempre alerta o estresado.
El trabajo, el cuidado de los hijos o de los parientes mayores, y otras cosas, pueden causar agotamiento mental.
Estas son las señales a las que debes prestar atención si crees que no estás de humor:
- Cuando no estás de buen humor, te enfadas fácilmente y eres impaciente: no puedes controlar tus emociones
- No puedes concentrarte en tu trabajo: estás distraído y todo parece insuperable
- Debido a la fatiga mental, se cometen más errores: se le cae un vaso o se confunden los nombres de pila
- Te sientes desconectado de la realidad: la somnolencia puede ser peligrosa en determinadas situaciones
- Cuando te sientes mal, te cuesta dormir: es un círculo vicioso
- Desarrollas malos hábitos: adicción
- Estás constantemente preocupado: la baja moral dispara el sistema nervioso (y estás cerca de la depresión)
- Cuando estás moralmente cansado, ya no puedes hacer deporte: tu tolerancia al esfuerzo disminuye
- Cambias tu dieta: prefieres alimentos muy dulces o muy salados
- Sientes más dolor: dolores de cabeza, musculares, etc.
No está de humor: ¿cómo volver a la pista?
Como he dicho, la moral baja está a un paso de la depresión. Por eso es importante que reaccione en cuanto se dé cuenta de que no está de buen humor. Sí, ante los primeros síntomas, hazte cargo para no dejar que se instalen problemas mentales más graves.
1. Cuando no estás de humor, necesitas encontrar pequeñas victorias
Esto puede parecer difícil de entender, pero es bastante sencillo. Enumera tres cosas positivas que te hayan ocurrido, que hayas visto o escuchado durante el día.
Antes de acostarte, llena tu mente de pensamientos positivos y tu cuerpo de relajación. ¿Cómo se puede mejorar el estado de ánimo? Aferrándose a las ideas positivas.
2. Rodéate de gente positiva
Por supuesto, no siempre se puede evitar a las personas tóxicas. Sus colegas pueden, por ejemplo, ser muy negativos o poco saludables. Pero cuando elijas a tu pareja y a tus amigos, tienes que ordenarlos.
Cuando uno está deprimido, necesita amabilidad, risas y apoyo. Así que elige a personas optimistas, desinteresadas y empáticas.
3. Si te sientes moralmente cansado, tómate un descanso
Puedes sentirte menos agotado si haces pequeñas pausas durante los largos periodos de trabajo mental. No hay un tiempo de descanso específico que se adapte a todos. Pero puedes recargar durante unos minutos cada 1-2 horas.
4. Tomar notas durante las reuniones si no estás de humor
Sentirse abrumado puede conducir a la fatiga mental. Tomar notas mejora tu memoria y te ayuda a estar al día. Intenta escribir a mano en lugar de hacerlo en el ordenador, ya que los estudios demuestran que esto mejora el aprendizaje.
5. Escribir un diario
Está demostrado que llevar un diario puede ayudar a reducir los síntomas de la depresión o la ansiedad en tan sólo un mes. Empieza escribiendo unos minutos cada día.
6. Ser activo
Está demostrado que puedes sentirte con más energía si haces ejercicio durante tus descansos. Prueba a hacer saltos y estiramientos durante unos minutos cada uno. O dar un paseo rápido de 10 a 15 minutos.
7. Pasar tiempo en la naturaleza es genial para la moral baja
No sólo se hace ejercicio, como ya se ha mencionado, sino que está bien documentado que pasar tiempo en la naturaleza puede mejorar el bienestar mental y la función cognitiva.
8. Escuchar música instrumental
Es la ocasión perfecta para sacar los auriculares y escuchar música clásica. Los estudios han demostrado que escuchar melodías no verbales puede ayudar a la relajación y mejorar el aprendizaje cuando se estudia.
9. Si no estás de humor, la palabra clave es: relajación
Es difícil evitar por completo el agotamiento mental. Pero puedes aprender a activar la respuesta natural de relajación de tu cuerpo. Puedes recibir un masaje. También puedes probar la meditación, el yoga o algo tan sencillo como ver una película divertida.
Si necesitas más apoyo, habla con tus amigos, tu familia o un profesional de la salud mental.
10. Cuida de ti mismo
Fijar los horarios de los tratamientos. Por ejemplo, date un masaje una vez al mes. O una manicura una vez a la semana. Lo importante es que te tomes un verdadero descanso de tu apretada agenda para hacer algo que realmente te haga bien.
Si la lectura le relaja, siéntese en el sofá y disfrute de la tranquilidad. En resumen, ¡haz lo que te gusta!
11. Determine su locus de control
Pregúntate: ¿qué factores puedes controlar?
La vida es agitada y puede hacer que te sientas abrumado e impotente. Sigue el ejemplo de los estoicos y analiza de forma realista lo que puedes y no puedes controlar en la vida. Haz una lista y céntrate en lo que puedes controlar.
12. Intenta dormir más
Es más fácil decirlo que hacerlo, pero merece la pena trabajar en tus hábitos de sueño. El insomnio y el sueño agitado pueden provocar un mayor riesgo de agotamiento mental. Si tiene problemas para dormir, intente cambiar su entorno de sueño, adoptar una rutina de sueño, etc.
13. Si no se siente bien, puede tomar un curso de vitamina B6 y magnesio
Esta combinación puede hacer literalmente milagros, ya que equilibra el sistema nervioso, ayuda a dormir mejor y calma el estrés y la ira.
14. Cambia tu dieta
Si sólo comes McDonald’s o alimentos grasos y azucarados, no puedes sentirte bien. De hecho, la falta de vitaminas provoca un descenso de la moral. Las grasas saturadas y trans pueden sustituirse por aceites vegetales, omega-3, frutos secos, pescado e incluso chocolate.
Por supuesto, sería bueno mantenerse alejado del alcohol o de cualquier otra sustancia peligrosa cuando no te sientas bien.
15. Utiliza la creatividad para levantar el ánimo
Sea cual sea tu talento, dedica al menos una hora a la semana a tu creatividad. ¿Te gusta dibujar? ¡Desenvío! ¿Le gusta hacer joyas? Date un capricho. La creatividad no sólo es una buena forma de cuidarse, sino que también aumenta la concentración y la sensación de bienestar.
16. Planificar a medio y largo plazo
Cuando no estás de buen humor, tiendes a pensar sólo en el corto plazo. Por ejemplo, el simple hecho de planificar el día por adelantado se convierte en una tarea difícil. Para levantar el ánimo, es esencial que hagas planes.
Establece objetivos realistas y trabaja duro para alcanzar tus sueños. Por ejemplo, si quieres aprender español para ir a un viaje educativo, ponte a trabajar.
17. Cómo elevar la moral: considere un cambio de medicación
Una medicación incorrecta puede tener efectos negativos en su bienestar mental. Si pruebas una nueva receta y no te sientes mejor después de 12 semanas, tus síntomas empeoran, tienes cambios de humor salvajes, o más, puede ser el momento de ver a tu médico.
18. Si te sientes deprimido y fuera de control, busca ayuda profesional.
Así que si todavía te sientes perdido, probablemente no te vendría mal hablar con un terapeuta. Procesar tus sentimientos internos puede ser una experiencia catártica y puede ayudarte a ver tus pensamientos desde una perspectiva externa.
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