El ghosting es cuando tu pareja desaparece de la noche a la mañana, sin ninguna explicación y sin avisar. Ayer, su relación parecía ser perfecta. Estabas enamorado (o eso crees) y tenías una relación sana y estable.
De hecho, incluso hacías planes para el futuro, como viajar y vivir juntos.
Entonces, de repente, su compañero desapareció. No ha muerto. No se enfermó. Él o ella se ha marchado y ha empezado a ignorarte, sin razón aparente.
Cuando no lo viste venir, la distancia y el silencio se interpusieron entre tú y tu ser querido. Y, el ghosting es exactamente eso.
Entonces, ¿qué clase de hombres deciden desaparecer de la noche a la mañana sin sentir ningún remordimiento ni necesidad de dar una explicación o cierre?
¿Cómo reaccionar ante el ghosting? ¿Puedes evitarlo en futuras relaciones?
La persona que ha sido fantasma se siente utilizada y desechada como un objeto viejo que ya no es útil.
No sólo pierde a un ser querido, lo que le duele emocionalmente, sino que también tiene que lidiar con la herida narcisista.
El individuo que decidió marcharse de la noche a la mañana se mostró completamente frío con los sentimientos de su pareja.
Se ha comportado como si ella no fuera sensible, inteligente o cariñosa.
Esto daña su autoestima. Además, el ghosting también puede tener graves repercusiones en el estado mental de la persona que ha sido ignorada de repente. Puede provocar trastornos psicológicos.
¿Qué es exactamente el ghosting?
Hacer de fantasma es un poco como hacerse el muerto. Este arte de dejar a tu pareja sin dar explicaciones va acompañado de una ausencia total de comunicación: no hay llamadas, no hay mensajes o simplemente es un cuco. Este anglicismo se ajusta perfectamente a su nombre: ghosting.
En los últimos años, el ghosting se ha convertido en un fenómeno generalizado. La modernización de la tecnología y de los métodos de comunicación ha facilitado la búsqueda de pareja.
Por ello, muchos adoptan el comportamiento de coger lo que quieren y luego tirarlo. Un solo clic puede hacer o romper una relación.
Como la gente tiene cada vez menos miedo a la soltería (ya que es muy fácil conocer gente nueva gracias a las redes sociales), se entrega a un comportamiento egoísta y superficial.
La pareja ya no es una persona amada y cariñosa, sino un objeto que sirve para quedar bien y que puede ser sustituido tan fácilmente como unos calcetines sucios.
La digitalización de la comunicación y la facilidad de acceso a Internet han convertido las relaciones amorosas en algo casi digital.
Ya no es necesario que os veáis, simplemente podéis mantener una conversación por Skype o Messenger. En estas condiciones, el ghosting se ha convertido en algo fácil de practicar.
¿Quiénes son los fantasmas y los que no lo son?
No podemos hablar de ghosting sin mencionar a los principales actores de esta nueva forma de separación.
Por un lado, tenemos a las personas que se van, o más bien desaparecen, es decir, los fantasmas.
Por otro lado, tenemos a las personas que se han quedado atrás, los fantasmas. Hay cuatro formas principales de fantasmas:
1. Seductores en cadena
El fantasma es la especialidad de este tipo de hombre. Para ellos, el juego de la seducción es mucho más importante que el amor o una relación seria.
Así, hacen una conquista tras otra y para deshacerse de su anterior pareja, lo ignoran.
Estos hombres no tienen tiempo que perder con la ruptura porque siempre van un paso por delante.
Aunque tengan una relación, ya están buscando su próxima presa porque rehúyen el compromiso serio. Consumen el amor como algunos consumen el alcohol: ¡sin moderación!
El ghosting es su arma letal porque les ayuda a pasar más fácilmente de una relación a otra.
Con ellos, la pareja nunca sabe qué esperar y se queda sola, literalmente de la noche a la mañana, sin saber qué ha hecho mal para merecer este comportamiento.
2. Personas que sufren sentimientos de abandono
El miedo al abandono controla la vida y las relaciones de este tipo de hombres. Siempre se sienten dejados de lado por su pareja, así que para evitar ser dejados de lado, prefieren irse para no ser heridos.
Optan por tomar el control de la situación de la manera más detestable, haciendo de fantasmas. Sin embargo, este comportamiento no pretende destruir a la otra persona.
Este tipo de hombre elige irse de esta manera para protegerse del dolor de una posible ruptura.
Al tomar el control de la relación, cree que también puede controlar su ansiedad y su miedo al abandono. Esta ilusión de poder le da cierta serenidad y seguridad.
3. Personas que tienen miedo al compromiso
Sin saberlo realmente, este tipo de hombres huye de las relaciones porque se asfixian cuando tienen pareja.
Son adictos a sí mismos que hacen todo lo posible para huir de la relación en la que están o para no tenerla. Adoptan una estrategia de huida, el ghosting. El miedo a la dependencia les lleva a actuar de esta manera irracional.
Con el riesgo de apego viene el riesgo de compromiso. Y esto es algo de lo que huyen como de la peste.
Optar por el ghosting es, de nuevo, una forma de controlar la relación, aunque suponga hacer daño a la otra persona. Estos hombres no sienten ningún remordimiento por las heridas psicológicas que pueden infligir a su pareja.
4. Pervertidos narcisistas
No se puede hablar realmente de ghosting sin tener en cuenta a los pervertidos narcisistas. Estos hombres necesitan controlar todo, su imagen, su pareja y su relación.
Están obsesionados consigo mismos y no les interesan en absoluto los sentimientos o las necesidades de su pareja.
Esta forma típicamente moderna de romper es como un golpe mortal para su víctima.
La pareja queda entonces impactada por la violencia de este comportamiento y la duda y la incomprensión se apoderan de ella.
¿Qué ha hecho para merecer esto?
Nada de nada… El pervertido narcisista simplemente no puede dejarse llevar y perder el control, aunque eso signifique herir o destruir el corazón de la persona que se supone que ama.
El ghosting es entonces una forma de poder sobre la otra persona: “Puedo hacer lo que quiera. Puedo ignorarte y faltarte al respeto. Y no puedes hacer nada para cambiar eso”.
En general, cualquiera puede ser víctima del ghosting. La sociedad moderna no puede proteger a nadie de este fenómeno cada vez más frecuente.
Sin embargo, las mujeres con problemas de autoestima o dependencia emocional son más propensas a atraer a los hombres fantasmas.
Esta falta de amor por sí mismos suele ser el resultado del abandono en la infancia o la adolescencia. Así que puedes imaginar lo que les hace el ghosting.
Los destruye porque revive viejas heridas de abandono. Como las mujeres que sufren de dependencia emocional no se gustan a sí mismas, eligen malas parejas como para castigarse. “¡No me merezco algo mejor que él!
Se sienten atraídas por hombres violentos o tóxicos que las maltratan y/o abandonan. Además, cuando estos hombres eligen el ghosting como forma de ruptura, ni siquiera las culpan. Para ellos, es un castigo que se merecen.
¿Cómo reaccionar ante el ghosting?
Cuando se es víctima del ghosting, no hay una solución rápida. No puedes tomar medicamentos para aceptar el dolor y hacer que desaparezca.
La medicación nunca borrará el acto despreciable del que has sido víctima. Puedes intentar hacer terapia para entender las acciones de tu ex pareja, pero esto no te protegerá del ghosting en el futuro.
La única manera de hacer frente al ghosting es cambiar de actitud.
Primero, tienes que curar tus heridas. Para ello, tienes que entender por qué te ha dolido tanto el comportamiento de ese hombre.
Es durante esta etapa cuando puedes recurrir a un terapeuta que te ayude a analizar el ghosting que has experimentado.
Es importante tomarse el tiempo necesario para sanar completamente antes de seguir adelante, ya que es la única manera de salir del círculo vicioso del ghosting.
En segundo lugar, tienes que ser honesto contigo mismo: nunca conseguirás que tu ex-amante te cierre las puertas. Y puede ser difícil seguir adelante sin una explicación.
El ghosting que has sufrido te ha hecho cuestionarte, pero probablemente también te ha enseñado muchas cosas.
Por ejemplo, qué tipo de comportamiento estás dispuesta a aceptar de un hombre y qué tipo de comportamiento no vas a tolerar en absoluto.
Tienes que dejar atrás esta relación y aceptar que nunca obtendrás la verdad.
Para ello, debes seguir cinco pasos clave que te enseñarán a responder positivamente al ghosting y a evitarlo en el futuro:
1. Aprende a quererte a ti mismo.
La mejor manera de dejar de ser una víctima es aceptarse a sí mismo tal y como es. El amor propio es una herramienta indispensable en la lucha contra el ghosting.
Recupera el control de tu vida cuidando de ti mismo.
¿Qué le gusta hacer?
¿Qué te hace feliz?
Construye tu vida como si ningún hombre fuera a estar en ella.
Esto significa trabajar en tu desarrollo personal para convertirte en una mejor persona. Céntrate en tus pasiones y en lo que te hace feliz y contento.
Si consigues crear un sentimiento de confianza y buena voluntad hacia ti misma, podrás luchar más fácilmente contra los hombres a los que les gusta controlar y utilizar el ghosting como método de ruptura.
2. Nunca te rindas.
Después del ghosting, hay dolor, incomprensión, vacío y sentimientos de abandono. Pero todos estos sentimientos no tienen que ver tanto con la otra persona.
Son, sobre todo, un reflejo de lo que sientes por ti mismo. Déjame explicarte, durante demasiado tiempo has cedido el poder de la felicidad a tu pareja.
Para ti, él era la única razón de tu amor y alegría.
Para dejar de ser víctima del ghosting, debes detener este círculo vicioso de autoflagelación aprendiendo a luchar por ti mismo.
Tu felicidad no debe depender de otra persona, sino de ti. Así que empieza a amarte a ti mismo de una manera que nadie más te ha amado.
Esta es la mejor manera de no lanzarse a ninguna relación a ciegas. Cuando eres feliz solo, te vuelves más selectivo con tus compañeros.
3. Elige perdonar
Todo el mundo comete errores. ¿Quién de nosotros puede tirar la primera piedra?
Así que perdónate por tus malas decisiones. Hiciste lo mejor que pudiste en el momento de la relación y tus decisiones fueron tomadas inconscientemente.
Claro, te llevaron al ghosting y al dolor psicológico, pero ¿quién podría haber predicho eso?
Tienes que ver el lado positivo de esta situación.
Si no hubieras sido víctima del ghosting, nunca te habrías cuestionado.
Nunca habrías tenido la oportunidad de aprender más sobre ti mismo. Ahora te estarás preguntando por qué sigues atrayendo al mismo tipo de hombres.
Además, el simple hecho de hacerse esta pregunta demuestra que está evolucionando y dando un nuevo paso en su vida. El fantasma te ha acercado finalmente a ti mismo. Así que, en cierto modo, puedes dar las gracias.
4. Aprende a elegir mejor a tus compañeros.
La anticipación es el arma fatal contra el ghosting. No se puede predecir este tipo de comportamiento, pero una cosa es cierta: hay que revisar los criterios de selección de socios.
Antes de iniciar una relación, observa su comportamiento. ¿Cómo se conocieron? ¿Qué tipo de personalidad tiene? ¿Cómo se comunica con usted?
Todas estas preguntas te ayudarán a identificar el tipo de hombre que es y, por tanto, a detectar los signos reveladores de un pervertido narcisista o un hombre tóxico.
Debes aprender a abrir los ojos y analizar la situación en su conjunto sin dejarte controlar por la atracción o los sentimientos que tienes por él.
5. Acepta tus errores y tu pasado.
Cada experiencia es un aprendizaje. Así que aceptar el hecho de que has hecho una mala elección de pareja es esencial.
No se trata de sentirse culpable, sino de tomarse el tiempo necesario para analizar su ex relación y descubrir qué señales reveladoras debería haber reconocido para evitar el ghosting. Aceptar lo inaceptable puede ser extremadamente catártico.
Ahora mismo te sientes vacío, pero es un buen momento para centrarte en ti mismo. Haz un balance de dónde estás en tu vida.
Pregúntate si estás preparado para una nueva relación o si necesitas más tiempo para sanar y descubrir quién eres realmente.
Por lo tanto, este vacío es, independientemente de la respuesta a su pregunta anterior, siempre una oportunidad para un nuevo encuentro. La de un buen hombre o la de uno mismo.
Conclusión
Te mereces ser amado y feliz. El hecho de que hayas sido víctima de un ghosting no debe hacerte cuestionar tus cualidades o valores.
Es una experiencia que le ha enseñado mucho sobre sí mismo. A partir de ahora, podrá detectar los signos reveladores desde la distancia. Además, ya no se dejará engañar por la sonrisa coqueta o los ojos de marimacho de su pretendiente.
Tenga paciencia, el periodo de curación puede ser largo. Seguramente tu confianza en los hombres se ha visto afectada, pero mientras algunos practican el ghosting como si fuera la nueva norma de la sociedad, otros se niegan a dejarse engañar por este comportamiento cobarde.
Hay buenos hombres ahí fuera que sólo están esperando una oportunidad para acercarse a ti y hacerte feliz.
Pero, antes de embarcarse en nuevas conquistas amorosas, debe estar en paz consigo mismo y con su pasado. Has sufrido de ghosting porque estabas demasiado involucrado en relaciones tóxicas.
Así que ahora centra toda tu energía y tiempo en ti mismo. Conviértete en tu prioridad y aprende a aceptarte tal y como eres.
Además, no dude en hablar de su experiencia con sus seres queridos. Te darán una nueva perspectiva y te demostrarán que no has hecho nada malo para merecer ese comportamiento.
Además, al hablar del ghosting, puedes estar ayudando a otras personas que han sido fantasma o evitando que tus amigos lo sean. No te cierres ni te avergüences de tu pasado.
Ha formado la persona que es hoy: una mujer fuerte e independiente.
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